Por José Luis Yánez Rodríguez, Cronista Oficial de la Villa de Teror

El domingo, 22 de mayo de 1910, los socios del Apostolado de la Oración al Sagrado Corazón de Jesús, programó la recepción en el lugar llamado “El Sifón” a la entrada del pueblo por El Hoyo, de la nueva imagen del Sagrado Corazón (1) adquirida en Barcelona por el párroco don Juan González para sustituir “a otra pieza anterior, colocada en el templo en 1880, pues ésta pasó a la localidad de Arbejales, donde se levantó, en 1918 y a instancias del sacerdote, un templo bajo dicha advocación” (2).

A las 7 de la mañana de aquel domingo, una comitiva de vecinos, socios del Apostolado, miembros de la corporación de entonces presidida por su alcalde Manuel Acosta Sarmiento -padrino de la nueva imagen- llegaron a El Sifón y allí mismo se celebró la primera misa en honor al nuevo Sagrado Corazón tras la que comenzó la procesión que lo trasladó al templo del Pino. La primera celebración tuvo lugar a la Octava del Corpus, el viernes 3 de junio de aquel 1910 en el que desde las 7 de la mañana, Adolfo Pérez Muñoz obispo de la Diócesis, celebró misa y repartió comunión a “los niños de primera comunión, a los socios del Apostolado de la Oración y a todos los devotos del dulcísimo Corazón”. Fue de tal relevancia que la parte musical de aquella primera función con la nueva imagen, contó con la participación de la orquesta de la Sociedad Filarmónica .

Su primera procesión por las calles terorenses tuvo lugar la tarde de aquel viernes, tras la cual y con el ritual de “las cinco visitas y la solemne reserva”, los Dávila de la Villa culminaron el día con la quema de varias piezas de fuegos artificiales.

Tal como nos describe Manuel Revuelta González, en su estudio sobre la difusión relativamente reciente de esta advocación “la propagación del culto público al Corazón de Jesús tiene su origen en las revelaciones místicas que Santa Margarita María Alacoque comenzó a experimentar en Paray‐le‐Monial desde 1673 hasta su muerte en 1690. Entre los primeros difusores del culto se destacan tres jesuitas franceses: San Claudio de la Colombière (1641‐1690), director espiritual de la Santa, y los Padres Juan Croisset (1659‐1738) y José de Galliffet (1663‐1749), que escribieron los primeros tratados sobre aquella devoción. Desde el principio fue una devoción muy ligada a la Compañía de Jesús, pues los jesuitas reciben –en las revelaciones de Margarita‐ el “munus suavissimum” o encargo honroso de propagar la devoción. Esta ligazón del culto al Sagrado Corazón con la Compañía de Jesús va a influir en su evolución histórica: extensión, marginación y renovación”

El párroco de Teror desde 1908 a 1927 Juan González, fue el artífice de todo aquello, así como de la culminación de su veneración en el municipio de Teror con el templo que unos años más tarde se construiría en el barrio de Los Arbejales.

No podía haber mejor lugar ni podía haber mejores hombres y mujeres para albergar los sueños del párroco, ni del vecino Juan Quintana, ni de tantas y tantos otros vecinos de Los Arbejales: los altos de la Villa de Teror; lugar de umbrías y arboledas, de fuentes y caseríos, de seculares tradiciones y gente sana, gente trabajadora y de fe profunda.

Y en lo alto, como para indicar claramente que si todos los caminos de la isla llegaban hasta Nª Sª del Pino, ésta nos decía que el camino no terminaba en Ella ni terminaba en la Plaza de Teror. Que los caminos de tradición y creencia, para estar completos, ya tenían una nueva meta: hacía arriba, hacia lo alto, hacia el lugar que albergaría el templo del Sagrado Corazón de Jesús.

Cuando el pueblo gozoso celebró el aniversario de su primera piedra, allá por 1914 ya, se pudo ver la general complacencia de toda la isla por lo que aquí se estaba haciendo y como un cúmulo de coincidencias y pequeños acontecimientos hacía ver la mano de Dios en lo que aquí ocurría por decisión de los antepasados de todos ustedes. Tras la “enorme concurrencia que asistió al acto religioso en el que el venerable Obispo Doctor Marquina dio la Comunión á innumerables personas”. Al regresar, sereno y complacido, el obispo a la villa recibió a mitad de camino el telegrama en el que se le daba la noticia de que el Papa había designado como Patrona de la Diócesis de Canarias a la Virgen del Pino.

Las campanas del Santuario y el Císter fueron echadas a vuelo y en el acto todas las casas de la Villa se engalanaron con banderas y colgaduras. De todas partes se lanzaron voladores y el pueblo en masa dando Vivas a la Virgen y a Teror se dirigió a la casa parroquial donde poniéndose a la cabeza de la manifestación el párroco y numerosos sacerdotes recorrieron las calles y con la banda de música fueron al palacio episcopal donde fue aclamado Marquina.

“Los comercios se cerraron y todas las casas pusieron luminarias No se recuerda en Teror un entusiasmo igual. La manifestación se disolvió en la iglesia. Por la noche, con asistencia del Sr. Obispo y estando el santuario lleno de bote en bote, se celebró una solemne función religiosa pronunciando un elocuentísimo discurso don Juan González. El Obispo entonó un Te Deum que oyó el pueblo de rodillas. En las calles siguió toda la noche el regocijo popular. Las músicas, las campanas y los cohetes voladores no cesaron de sonar en medio de las aclamaciones y los vítores luciendo toda la Villa espléndidas iluminaciones”

Todo eso sucedió cuando el pueblo celebraba tan sólo un año del inicio de esta sacra obra; pero sería un tiempo más tarde, el 29 de junio de 1918 cuando volvería nuevamente Ángel Marquina y Corrales al templo de Arbejales. En la misa de Pío X de aquel día, oficiada de Pontifical, corrió la oración sagrada a cargo del Magistral de La Laguna Heraclio Sánchez y asistieron comisiones de Adoración Nocturna de Las Palmas, San Mateo y Montaña Cardones para hacer la vigilia en el nuevo templo. El obispo terminado el Pontifical dedicó la Diócesis al Sagrado Corazón de Jesús. Y todos estaban de acuerdo; el templo de Arbejales significaba la abnegación de un pueblo “sin ejemplo en esta isla que con delirante entusiasmo aceptó con fe y con patriotismo una obra muy superior a sus fuerzas, y habiéndola coronado con grandeza sin igual”

Y el Sagrado Corazón trajo la fuerza y el crecimiento a todo el barrio.

Por todo aquello que retorna este año tras la dolorosa ausencia de la pandemia, hace 76 años el viernes 28 de junio de 1946, la celebración de las fiestas fueron de especial relevancia.

Su descripción es como la de muchos días del Corazón de Jesús vividos en estas últimas décadas, pero no deja de ilusionarnos comprobar como hemos sabido perpetuar esta herencia inmaterial de nuestros mayores:

“Artísticas alfombras de flores tapizaban la que había de seguir la procesión y aparecían enramadas sus calles y embanderados loa balcones y ventanas. En el magnífico marco natural de Teror, animadas sus calles por imponente muchedumbre, el espectáculo resultaba realmente maravilloso. Al olor fiel incienso mezclábanse el perfume embriagador del romero y el suave aroma de las flores. Una finísima lluvia de pétalos de rosas caía constantemente sobre la Imagen del Sagrado Corazón de Jesús y el Santísimo que, bajo palio, le seguía. Con el alegre tintinear de las campanas de la iglesia y conventos vecinos, se confundía el ruido de los cohetes, mientras a los acordes de la banda municipal entonaban los fieles cantos de alabanza al Señor”

Terminada la procesión de aquel día, se dirigieron las autoridades seguidas por la banda municipal siempre presente en las efemérides terorenses, a una de las nuevas calles que por acuerdo del ayuntamiento recibía el nombre del fallecido cura Juan González, el ilusionado que tanto luchara años antes por la difusión e implantación de advocación, templo y fiesta.

Una vez descubierta la lápida con el nombre de la nueva calle terorense;, Antonio Socorro agradeció la corporación el acuerdo tomado que hacía justicia a la memoria del párroco al que él mismo sustituyó en 1927 y al se debía por sus “sacrificios y fecunda labor, entre otras importantes cosas, la construcción del templo al Sagrado Corazón de Jesús en Arbejales y la fundación del Apostolado de la Oración”

El Corazón de Jesús es festivo en Teror, Villa que demuestra así el profundo amor, la devoción que sus mujeres y hombres tenemos, hemos tenido siempre, heredada desde la infancia del fervor de nuestros padres, de nuestros abuelos, en nuestros hogares hacia el esta santa advocación.

El pasado año se ha querido expresar por parte del ayuntamiento y ambas parroquias aquel inicio de superación de las tristes circunstancias que rompieron el discurrir festivo del Sagrado Corazón en Teror, con la realización de una única alfombra delante del pórtico de cada uno de sus templos.

El presente año volvemos año con la fuerza que nos da nuestros sentimientos, a recuperar esta tradición.

NOTAS

  1. PROGRAMA DE LA FIESTA QUE DEDICAN LOS SOCIOS DEL APOSTOLADO DE LA ORACIÓN AL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN LA IGLESIA DE NUESTRA SEÑORA DEL PINO DE ESTA VILLA DE TEROR (1910)

22 de mayo

A la 7 de la mañana en el punto de la carretera llamado Sifón se bendecirá la nueva preciosa Imagen del Sdo. Corazón de Jesús, que apadrinará el Sr. Alcaide del Itre. Ayuntamiento de esta Villa D. Manuel Acosta Sarmiento; se celebrará luego en el mismo lugar la Santa misa y á su terminación se ordenará la solemne procesión para conducir la Sagrada Imagen al templo parroquial.

26 de mayo

Dará comienzo la solemne novena á las 7 y media de la noche con exposición de S. D. Majestad, meditación, plática y reserva del Smo. Sacramento.

3 de junio

Fiesta del Sacratísimo Corazón de Jesús. A las 7 de la mañana el Iltmo. y Reverendísimo Sr. Obispo celebrará el Sacrificio de la Misa en la que dirigirá su fervorosa y apostólica palabra á los fieles, distribuyendo luego la Sagrada Eucaristía á los niños de primera comunión, á los socios del Apostolado de la Oración y á todos los devotos del dulcísimo Corazón. Al terminar la Sta. Misa se expondrá S. D. M. quedando de manifiesto el Señor todo el día.

A las 10 solemnísima función á la que asistirá de medio Pontifical el Ilmo. y Rvmo. Prelado y predicará el Rvdo.Sr. Cura Ecónomo.

La función de la tarde empezará á las7 y terminará con la procesión, las cinco visitas y solemne reserva. A la salida de la función se quemarán algunas piezas de fuegos artificiales.

4 de junio

Continúan los ejercicios del mes del Sdo. Corazón con exposición, meditación y plática, á las 7 de la mañana en los días laborables y á las 7 de la tarde en los festivos.

25 de junio

A las 2 de la tarde comienza el jubileo toties quoties del Sdo. Corazón.

26 de junio

A las 7 de la mañana se expone S. D. M. quedando de manifiesto todo el día.

A las 7 de la tarde, función como el día del Sagrado Corazón.

2.- “EL PATRIMONIO HISTÓRICO DE LA BASÍLICA DEL PINO DE TEROR” HERNÁNDEZ SOCORRO, MARÍA DE LOS REYES Y CONCEPCIÓN RODRÍGUEZ, JOSÉ,  Cuadernos de Patrimonio Histórico, 2005